Desmasificando los Medios de Comunicación
Por: Félix Corona
El concepto de la desmasificación de los medios fue introducido por el condecorado periodista Estadounidense Alvin Toffler finalizando la década de los años setenta. Este título es parte importante del libro La Tercera Ola, donde este renombrado autor futurista divide gran parte del siglo veinte en otras dos olas atribuyendo a cada una, con la debida separación, características muy distintivas, todo en el contexto de la comunicación.
Aunque Alvin es súper conocido en su país natal, Estados Unidos y en algunos de los países más avanzado de nuestra América Latina, también es cierto que por estas latitudes no se conoce a cabalidad todo su legado. Esa es una razón más que suficiente para introducirles un poco de su biografía y más adelante realizaré los comentarios apropiados sobre la primera, segunda y tercera ola.
Breve Biografía sobre el autor
Alvin Toffler Nació el 3 de octubre de 1928, es un escritor y futurista estadounidense doctorado en Letras, Leyes y Ciencia, conocido por sus discusiones acerca de la revolución digital, la revolución de las comunicaciones y la singularidad tecnológica. Sus primeros trabajos están enfocados a la tecnología y su impacto. Más tarde se concentró en examinar la reacción de la sociedad y los cambios que ésta sufre. Sus últimos trabajos han abordado el estudio del poder creciente del armamento militar del siglo XXI, las armas y la proliferación de la tecnología y el capitalismo. Entre sus publicaciones más famosas se destacan La revolución de la riqueza, El cambio de poder, El shock del futuro y La tercera ola. Está casado con Heidi Toffler, también escritora y futurista. La obra "La Tercera Ola" de 1980, definitivamente lo ubicó como uno de los futuristas más respetados en el mundo.
La Primera Ola
Describe a las personas como integrantes de grupos con cierto nivel de inocencia y muy escasa comunicación, gente que imita a otro que no conoce nada. Su limitada comunicación se basa en cuestiones estrictamente de supervivencia. Una civilización basada en el autoabastecimiento que origina toda una ola de consecuencias culturales. Al no disponer de Radio ni Televisión en el hogar los niños no tenían la posibilidad ver o escuchar sobre otras culturas y civilizaciones, esto se convirtió en un círculo vicioso donde la ausencia de comunicación les convertía en ignorantes. Antes de la aparición de los medios de comunicación las personas crecían en un caserío donde los cambios fueron nulos o muy lentos por las pocas personas que actuaban en su entorno, estaban circunscritos al maestro, al cura, al cacique o a la familia.
Debo señalar que el paso de la primera Ola hasta llegar a lo que el autor describe como segunda ola tardó miles de años. La vida era muy distinta a como la conocemos hoy. No había vehículos de motor, por tanto, las carreteras y autopista no existían, esto es una razón por la que muy pocos se animaban a ir lejos donde podían encontrar otros modelos de vidas posiblemente más avanzados que les permitiera mejorar su calidad de vida.
Con la llegada de los medios de comunicación y la creada necesidad de información nació lo que denomina el autor “la segunda ola”।
La Segunda Ola
Según el autor de La tercera Ola, una serie de imágenes como Jesús en la cruz, Lenin con gesto de triunfo frente a una bandera roja ondeante, la imagen de Charles Chaplin con sombrero de hongo y bastón y algunos productos publicitados, han sido inyectados por los medios de comunicación en la “mente de la masa” logrando la uniformización de comportamiento requerida por la sociedad industrial de producción. Indica Alvin que a lo largo de la segunda ola los medios de comunicación de masas se hicieron cada más poderosos, en contraste con lo que sucede en la tercera ola donde los medios en lugar de extender su influencia se han visto rápidamente obligados a compartirla.
La Tercera Ola
Es descrita como la era del cambio y la aceleración de la sociedad, las informaciones y las imágenes llegan muy rápido creando la necesidad de una constante actualización.
Para el año 1979 cuando fue publicada la obra “La Tercera Ola” no se conocía el Internet como ahora, aunque sabemos que para el año 1964 ya era una realidad. Fue a partir de 1994 que el público tuvo acceso a la Web. Hoy casi no podemos imaginarnos un mundo sin este servicio que lo engloba todo a nivel de informática, comunicaciones múltiples y simultáneas. No dudo que el avance que logrado a nivel tecnológico ha contribuido enormemente a la desmasificación de los medios, mas, en los años anteriores al 1994 y un poco más atrás de los ochenta existieron diversas maneras de desmasificarlos.
Grandes medios impresos han sido desplazados por publicaciones más modesta y de mayor proximidad al lector. Nuevas formas de comunicación han absorbido al público en general y señala el autor las pequeñas grabadoras de los años 60, reproductoras de cintas magnetofónicas y más adelante la Citizen Band Radio o CB, radios de frecuencias compartidas permitiendo la comunicación en dos vías donde el oyente puede responder instantáneamente al mensaje de su transmisor diferenciándose de la Radio tradicional donde uno solo escucha.
Además de esta tecnología en los años 70 se hicieron varios experimentos que contribuyeron a la desmasificación. Entre estos medios se halla el sistema “Hi Ovis” patrocinado por el gobierno japonés, basado en fibras ópticas. La particularidad de este medio es que el televidente puede comunicarse y ser visto por los presentadores de los espacios en vivo a través de un micrófono y una cámara de televisión colocada encima de su televisor. De esa misma manera se hicieron otros intentos en Los Estados Unidos con muy buenos resultados.
Uno de los temas más importante que destaca el autor sobre la desmasificación de los medios de comunicación es la gran gama de opciones que tiene la gente de la tercera ola. Ningún medio se puede atribuir la atención absoluta del público. Al referirme a la prensa escrita, es colosal la cantidad que ha surgido a nivel local entre los pueblos y provincias o pequeños estados. Miles de estaciones radiales y televisivas están realizando programas interactivos donde los oyentes desde la comodidad de sus hogares pueden interactuar participando en las transmisiones.
Los miles de canales televisivos que se ofrecen vía satélites a la gente que puede comprar una parábola y un recibidor o los que llegan a través del cable contribuyen también con la desmasificación de los medios।
La Internet
Como indiqué más arriba, en el año 1979, casi la totalidad de la población mundial desconocía la existencia del Internet, sencillamente no estaba disponible, es quizás la causa por la que un futurista como Alvin Toffler no lo menciona en ninguna parte de su best seller। Hago referencia a esto porque particularmente creo que la Web como se le conoce es el medio tecnológico que más ha contribuido a la desmasificación de los medios de comunicación। Posiblemente los periodistas somos los más beneficiados del establecimiento de la Web.
Existen diferentes anchos de bandas que permiten transmitir todo tipo de información, ya sea audio, voz, fotografías, videos y periódicos completos son diseñados en algún estado o país e impresos en lugares remotos en cuestión de minutos. En mi caso particular, trabajo en varios medios y envío todas las informaciones a través del Internet, ahorrando así, no solo tiempo sino todos los gastos y riesgos que implica trasladarse de una ciudad a otra tan solo a servir una noticia o reportaje.
La implementación del sistema de Wifi, disponible gratuitamente en plazas de las principales ciudades del mundo y en nuestro país, es otro aporte que ha multiplicado las posibilidades de los individuos para comunicarse con sus semejantes. Más de una sexta parte de la población mundial es "usuaria" de las Tecnologías de la información que sirve el Internet, aproximadamente 1350 millones sobre los 6.000 millones que habitan el mundo.
Un párrafo concluyente
El afamado periodista Alvin Toffler que ahora cuenta con 80 años de edad sella al decir que; al aumentar el total de información necesaria para la coherencia del sistema social, y la velocidad que debe ser intercambiada, la tercera ola hace saltar en pedazos el entramado de la anticuada y sobrecargada infosfera de la segunda ola y contribuye otra nueva que ocupe su puesto. A medida que la gente que nos rodea se va haciendo más individualizada o desmasificada necesita más información
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